
Por En-Off
Representantes del sector agrícola se reunieron este miércoles en Talca, convocados por Agrícola Central A. G. para discutir la crítica situación que enfrenta la producción de trigo en el país. Durante el encuentro, al que asistieron agricultores y gremios de diversas regiones del país, se reconoció que la crisis agrícola, especialmente en el sector triguero, ha alcanzado niveles alarmantes. Entre los temas abordados, destacaron la reducción de hectáreas sembradas, la pérdida de empleos directos e indirectos y el abuso de posición dominante por parte de los grandes molinos.
Uno de los puntos más críticos discutidos fue la falta de correlación entre el precio internacional del trigo y el precio pagado por los molinos a los productores nacionales. Los agricultores denunciaron que este precio no solo es arbitrario, sino que carece de transparencia, lo que pone en riesgo la rentabilidad del cultivo de trigo en el país. En este context, por parte de Agricultores Unidos A. G. se hizo un llamado a las autoridades para establecer un precio mínimo basado en el precio de paridad de importación, con el objetivo de proteger a los agricultores de los abusos de mercado.
Falta de transparencia en la evaluación de la calidad del trigo
Otro tema destacado fue la falta de transparencia en la evaluación de la calidad del trigo nacional frente al importado. Los gremios propusieron la creación de un organismo independiente que realice análisis de calidad homologados, con el fin de asegurar que las evaluaciones se realicen de manera justa y equitativa. Esta medida busca garantizar que los productores locales no sean perjudicados por comparaciones injustas con el trigo importado, de acuerdo a lo señalado desde Agrícola Central A. G.
Los asistentes coincidieron en que la crisis del trigo requiere de una intervención política urgente. Se propuso la creación de una mesa de trabajo que incluya a los gremios agrícolas, al gobierno y a la industria molinera, con el fin de abordar la regulación de las importaciones, establecer precios mínimos y asegurar la transparencia en la calidad del trigo. Además, se subrayó la importancia de involucrar a parlamentarios y otras autoridades políticas en la búsqueda de soluciones a nivel estatal.
Entre los acuerdos alcanzados, destaca la solicitud formal al Ministerio de Agricultura para la creación de una mesa de trabajo que aborde estos desafíos de manera estructurada. También se acordó involucrar a los parlamentarios de la región para asegurar el apoyo necesario en la implementación de políticas que favorezcan la producción nacional de trigo y protejan el empleo rural.
Tras la reunión, dirigentes de la zona central y de las regiones de La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos coincidieron en la necesidad de una intervención urgente y efectiva por parte del Estado para mitigar los efectos de una crisis que ha provocado una disminución del 55% en las hectáreas sembradas de trigo en las últimas dos décadas. Los productores agrícolas hacen un llamado a la acción, advirtiendo que la falta de soluciones podría comprometer no solo la producción nacional, sino también la seguridad alimentaria y el empleo rural.